El Instituto Guestalt de Lima (IGL) alerta que después del terremoto se están registrando nuevos casos de suicidios, ya que La semana pasada se quitaron la vida cuatro personas, entre ellas un niño, una joven universitaria, un estibador y un empresario, inmersos en una profunda depresión por la tragedia que afectó al sur del país. Estas cuatro personas se suicidaron dentro de sus viviendas situadas en diversas zonas de la capital.
Según diversos estudios, después de un evento o suceso natural como: huracán, sismo o incendio, aumentan las posibilidades de presentar cuadros de depresión, suicidios y adicciones, de ahí la importancia de ayudar a las personas afectadas emocionalmente por el terremoto.
"Hay que tener especial cuidado con los damnificados del Sur, ya que son vulnerables emocionalmente a diversos problemas de salud mental. Todas las personas han sufrido pérdidas: de seres queridos, viviendas, escuelas, trabajos, negocios, etc.", alertó el psicólogo Manuel Saravia, director del Instituto Guestalt de Lima.
"Hay que tener especial cuidado con los damnificados del Sur, ya que son vulnerables emocionalmente a diversos problemas de salud mental. Todas las personas han sufrido pérdidas: de seres queridos, viviendas, escuelas, trabajos, negocios, etc.", alertó el psicólogo Manuel Saravia, director del Instituto Guestalt de Lima.
Suicidios
Un primer caso sucedió en la avenida Costanera, San Miguel, donde el estibador Marco Antonio Vargas Escajadillo (25), llegó ebrio a su vivienda y discutió con su padre y su hermana, se encerró en su habitación, juntó varias bolsas de plástico, las anudó y se ahorcó luego de atarlas a una viga del techo
Igualmente procedió, pero con una soguilla de nylon, el menor de iniciales F.J.P. (13), luego de ser reprendido por sus padres. Fue en el jirón Arequipa, Callao.
Por su parte, la joven estudiante de Odontología de la Universidad Alas Peruanas, Brenda Cortés Collazos (18), se autoeliminó en un departamento de la avenida Santiago Cordero 226, Balconcillo, La Victoria. Ella tomó raticida.
Finalmente el empresario Augusto Ricardo Arrieta Uceda (33) se disparó un balazo en el estómago. Fue trasladado a la clínica Javier Prado donde falleció. Sucedió en la urbanización Cahuachi, San Luis
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